Por Estudio Arquitectura Garcia. El dormitorio es un espacio íntimo y personal donde buscamos descansar y relajarnos. Por eso, es importante tener en cuenta algunos aspectos clave a la hora de decorarlo. En este artículo, te presentaremos los «sí» y «no» para lograr un dormitorio acogedor y armonioso. Sigue leyendo para descubrir cómo aprovechar al máximo este espacio tan especial.
NO usar colores llamativos y estridentes en objetos grandes. Cuando se trata de los colores en tu dormitorio, es recomendable evitar tonos llamativos y estridentes en objetos grandes, como las paredes o los muebles principales. Estos colores pueden resultar abrumadores y dificultar el descanso. En su lugar, opta por colores neutros para las superficies más grandes y utiliza tonos más vibrantes como acentos en objetos más pequeños, como cojines, lámparas o cuadros. Esto permitirá que los elementos destacados se conviertan en puntos focales sin abrumar visualmente el espacio.
SÍ al cabecero mínimo del mismo ancho de la cama, o más ancho. El cabecero es un elemento importante en cualquier dormitorio, ya que agrega estilo y define el espacio de descanso. Evita la elección de un cabecero más pequeño que la cama, ya que puede hacer que la habitación parezca desequilibrada. Opta por un cabecero que tenga al menos el mismo ancho que la cama o, preferiblemente, uno más ancho. Esto creará un aspecto más completo y proporcionado, brindando una sensación de confort y sofisticación.
NO a las cortinas cortas. Las cortinas desempeñan un papel crucial en la estética y funcionalidad de un dormitorio. Evita utilizar cortinas cortas que no lleguen hasta el suelo, ya que pueden hacer que la habitación parezca desordenada y visualmente incómoda. En su lugar, opta por cortinas que lleguen hasta el suelo o unos centímetros más largas. Esto ayudará a crear una sensación de amplitud y elegancia, además de permitir un mejor control de la luz y la privacidad.
SÍ a alfombras debajo de la cama y más grandes o alfombras laterales. El uso de alfombras adecuadas puede transformar por completo la apariencia de un dormitorio. Evita utilizar alfombras pequeñas o colocarlas únicamente al pie de la cama, ya que esto puede hacer que la habitación parezca desequilibrada y fragmentada. En su lugar, opta por una alfombra que se extienda debajo de la cama, asegurándote de que sea lo suficientemente grande como para enmarcar el área de descanso. También puedes considerar agregar alfombras laterales a cada lado de la cama para agregar calidez y definir el espacio.
NO sobrecargar el ambiente y usar muchos elementos. Cuando se trata de la decoración de un dormitorio, menos es más. Evita sobrecargar el ambiente con demasiados elementos decorativos y mobiliario innecesario. En lugar de ello, enfócate en el cabecero como punto focal principal y utiliza mesitas de noche y lámparas para agregar.
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